20070331 :: Hoy fuimos hasta el aeropuerto de Frankfurt para despedir a Virginia y Barbara. Si bien estoy un poco triste, ya se me va a pasar. Tuve una muy interesante conversacion con una amiga de la residencia (Rebecca) acerca de los miedos de los alemanes, su individualismo y sus limitaciones. Una velada extremadamente interesante; ella tambien estaba triste, pero por otras razones.
La vasta mayoría de la gente que conocí en estos últimos tiempos tienen buena onda; algunos son atípicamente fenomenales (como Virginia, Barbara y Jesus), y son muy contadas las personas con quienes tuve problemas (me sobran los dedos de la mano).
En estos casos, las conductas observadas (si bien no completamente atípicas), resultan igualmente desconsideradas. Es muy interesante ver lo que pasa en los grupos de gente, porque esas personas son inmediatamente separadas del resto, así que resulta bastante fácil saber con quién vale la pena juntarse y con quién no.
A la noche tuvimos una fiesta en el tercer piso de la residencia junto a muchos otros habitantes, sus amigos y los amigos de sus amigos. Hoy fue un dia triste, pero por suerte, Jesus me puso pilas en la fiesta, y estuvimos bailando y jodiendo hasta las 5am.
